VUELTAAVER
Vuelta a ver
la niña que desaparece,
y que olvidarse no se puede.
Fue vista sin acompañante
otra vez
y aún así sonriente.
Ha estado tan distante,
tan solitaria
que cuando llora,
llora sola
pero nunca habla.
"-¿Cómo estás?
-bien...
¿por qué?"
ya es tonto preguntar.
Nunca me contesta
de manera sincera;
no es ella quien contesta
el sonido del dolor en sus palabras
Siempre teléfono al oído,
ya se olvidó de sus amigos,
si es que lo fuimos,
pues fui yo en olvidar el primero.
Es casi un fantasma.
Ya no sé
si alguna vez
yo le conociera.
"-Me preocupas.
-No lo hagas",
me contestaba
con sonrisa en cara.
Qué bella sonrisa iluminada
se carga esa niña.
No sé si come,
no sé si habla,
no sé si tiene amigas,
ya no sé si vive,
de ella ya no sé nada.
"-¿Podemos hablar este receso?
-Pues... sí, claro"
me dijo con su dulce voz,
pero nunca llegó.
Como están las cosas
no sé por qué
no se ha quitado la vida
ya ni parece que esté.
